LA COCINA COMO ESPACIO DE CONVERSACIÓN
Por Camila Cariaga
Comer, no solo es un momento de placer gastronómico en el
que somos felices probando nuestro plato preferido, sino que, la previa a esto,
puede convertirse en un excelente momento de intimidad y complicidad en pareja.
La cocina y la mesa de comedor, son un espacio importantísimo en cada hogar ya
que, gran parte de la historia familiar se gesta en estos lugares.
En la mesa, nacen
nuevos amores, se concretan proyectos, se recibe a la familia y amigos y se celebran momentos especiales, por lo que
no es un lugar cualquiera dentro del hogar.
Lamentablemente, para muchos (incluido mi marido), la idea
de “meterse a la cocina” es señal de trabajo, aburrimiento, cansancio y lavar
platos. Pero la verdad es que, hacerlo en pareja puede ser bastante más
entretenido de lo que puedes imaginar.
En esta época, la falta de tiempo muchas veces hace que este
proceso sea cada vez más corto, pero la verdad es que es un buen momento para
conversar con nuestra pareja y que distintos temas vayan fluyendo de una manera
natural y reflexiva.
Con nuestra hija, son pocas las veces en que podemos conversar sin que
ella quiera ser el centro de atención, así es que como la cocina le aburre,
prefiere ir a jugar y nosotros aprovechamos de conversar.
No es necesario hablar sobre política, el último
descubrimiento de la ciencia, o si el hombre de verdad llegó a la luna o no, sino
que, estando juntos en un lugar cálido y lleno de cosas ricas para preparar y
picotear y en donde se pueden formar dinámicas muy entretenidas e intimas al
contarnos las cosas cotidianas del día, lo que paso en nuestras respectivas
oficinas, las copuchas nuevas de la familia, nuestras alegrías y
preocupaciones, o conversar sobre el vino que se está helando en el refrigerador
y que nos espera para cuando los niños se vayan a dormir.
A través de la comida, se transmiten un gran número de
emociones y el cocinar, es un gesto de amor muy especial. ¿Cómo no querer
compartir este placer si no es junto a quien amamos?
Por eso, los invito a tomar este espacio como un lugar de
amor más, en donde podamos comunicarnos , conversar de la vida… o incluso algo
más atrevido … mientras saboreamos el más
delicioso de los bocados.