Los Tuyos, los MÃos y
los Nuestros / Padres separados ¿Hijos felices?
En nuestra organización, estamos
siempre atentos a las necesidades de quienes nos consultan, razón por la cual
hemos creado una división de talleres de temas especÃficos que serán de gran
utilidad para las parejas actuales.
Estos talleres son en principio individuales, es decir con una
sola pareja, o incluso con sólo un
miembro de ella. Son de corta duración,
de dos a cuatro sesiones, en donde tendrán la oportunidad de aprender la forma
correcta de afrontar la situación que los aqueja.
Hoy les queremos presentar dos de
ellos:
Los Tuyos, los MÃos y
los Nuestros.
Este taller lleva el nombre la
famosa pelÃcula norteamericana. Asà hemos querido representar una temática que
nos parece muy interesante y tiene que ver con los nuevos vÃnculos calificados
como familias ensambladas o mixtas. Esta es
aquella familia en la cual uno o ambos miembros de la actual pareja
tienen uno o varios hijos de uniones anteriores. Dentro de esta categorÃa
entran tanto las segundas parejas de viudos y viudas como de divorciados,
separados y de madres o padres solteros.
“Nos divorciamos como pareja, no
como padresâ€
En este taller se intenta darle
una forma precisa de salud emocional a
la situación de madrastra o padrastro tan mal vista en nuestros tiempos. Los
adultos y los chicos sufren al tener que adaptarse a pérdidas y cambios. Frente
a esto, debemos tener en cuenta que cada uno de los integrantes de la nueva
familia viene de un “Dueloâ€... una pérdida de relaciones, de modos de ser y
funcionar, de roles y prototipos y como todo duelo debe respetarse en cada una
de las etapas, para poder dar espacio a la nueva familia a configurar.
Una de las cosas a tener en
cuenta, es que los vÃnculos con los hijos son más intensos que con la nueva
pareja, al menos al inicio. Esto genera frecuentemente conflictos de lealtades
entre los miembros de la pareja. El adulto que se une a una persona con hijos,
a veces, no suele sentir que la relación que su pareja tiene con él sea la
primaria para esa persona. A su vez, hay un padre o una madre actualmente
presente o en el recuerdo, cuya existencia como tal se mantiene, a pesar de
haber concluido el vÃnculo como pareja. La nueva familia deberá convivir con la
presencia (real o virtual) de un ex-marido o una ex-mujer.
¿Cómo manejarnos con los nuevos
vÃnculos?, ¿hasta donde se puede
intervenir como pareja de él o ella respecto a sus hijos?, ¿qué lugar ocupo en
esta nueva configuración?, son algunos de los interrogantes que nos acompañan
frente a estas situaciones, y a veces, no sabemos cómo dirigirlas. Además de
aprender a expresar de manera adecuada la información, responder cada pregunta
de forma reflexiva y coherente, no sobreproteger
a nuestros hijos, delimitar espacios fÃsicos, son algunos tips entre otros, que
se deben tener en cuenta frente a estas situaciones.
El poeta Samuel Johnson, define a los segundos
matrimonios o uniones como “el triunfo de la esperanza sobre la experienciaâ€.
Abramos un espacio óptimo para reflexionar que, la esperanza sumada a la
experiencia y a la buena información y capacitación, son la receta perfecta
para ser feliz y pasarlo bien en pareja... a pesar de los problemas.
Padres separados ¿Hijos
felices?
Si bien es cierto, nuestra organización
es pro-pareja y por lo mismo, cada vez que una pareja nos consulta hacemos
todos los esfuerzos necesarios para que la relación no se rompa. A veces
enfrentarnos a esa situación es inevitable. Entonces “bajamos un peldaño†y
nuestra objetivo se centra en que en este nuevo escenario los hijos sufran lo
menos posible. Porque es muy frecuente, que tras romper la relación de
pareja, las personas no sepan cómo mantener una relación como padres. En
teorÃa, el divorcio sólo deberÃa alterar la relación de pareja y no la relación
con los hijos. Cuando esto no sucede asÃ, los hijos y los adultos sufren.
Como hemos visto, las personas
que se encuentran en proceso de separación tienen que enfrentarse a la
reestructuración de sus vidas y de su propia identidad como individuos. Y a la
vez, tienen que hacerse cargo de las necesidades fÃsicas y emocionales de sus
hijos. ¡Qué ardua tarea!
Cuántas veces hemos oÃdo: Los
hijos son los mayores perjudicados en una separación o divorcio, ¿Tiene que ser
as� Creemos que el adulto tarde o temprano acaba superándolo, pero los niños
han perdido para siempre su unidad familiar “conocidaâ€, el grupo único en el
mundo al que pertenecÃan sólo ellos y sus hermanos. Todo puede cambiar, todo se
ha desestabilizado y necesitan más que nunca el apoyo de sus padres para saber
que jamás dejarán de ser parte de ese grupo, parte de una Familia, que ahora es
diferente a la anterior, ya que debido a las trasformaciones que tuvo que
enfrentar, ha tenido que reestructurarse...sin embargo el amor hacia ellos no
ha cambiado.
La idea es ofrecer algunos tips y
herramientas a tener en cuenta a la hora
de dialogar tanto con su ex pareja como con sus hijos, para que la comunicación
sea efectiva y afectiva teniendo en cuenta que el objetivo principal se basa en
promover la salud emocional de todos los integrantes de la familia. Estrategias
como los 10 NO que todo padre debe intentar evitar, como acordar maniobras
frente a: la disciplina de ambas casas, horarios de visita, que el niño o
adolescente no sea el mediador o el chivo emisario de información que los
adultos deben aprender a manejar, en fin, algunas recetitas para procurar
mantener la paz y la felicidad en las nuevas familias que se están armando, es
decir, la familia de Papá y la familia de Mamá.
Jennifer Rigazzi Jefa División de
Capacitación